¿Puedo hacerme un injerto capilar sin rapar la cabeza?
By Prof. Dr. Soner Tatlidede 2020-02-05
Un injerto capilar sin rapar la cabeza es el sueño de muchos pacientes que quieren realizar un trasplante de pelo tras haber consultado el precio de un injerto capilar en Turquía, pero que temen las consecuencias estéticas de este tipo de intervención, ya que un injerto FUE sin rapar no es algo habitual y técnicas como la FUT -también llamada "de la tira"- que pueden no requerir el rasurado, no son aconsejables debido a su complicación y a las cicatrices que dejan.
Pero entonces, ¿siempre hay que raparse para implantarse pelo? ¿Es posible un injerto sin rapar? ¿Podemos evitar el rapado que tantos temen -especialmente las mujeres- a la hora de llevar a cabo una operación de trasplante? ¿Qué ventajas e inconvenientes tiene un implante capilar sin rapar la zona operada? A estas y otras cuestiones vamos a contestar en este artículo.
Cómo hacer un trasplante capilar sin rapar
¿Es necesario raparse para un injerto capilar? La respuesta dependerá de cada paciente y de la intervención a que deba someterse. En principio, un trasplante capilar sin rapar la cabeza totalmente es posible si sólo se va a tratar una pequeña zona; no es lo mismo tener que injertar 4.000 folículos que una intervención en la que sólo se implanten 1.000, por ejemplo para cubrir entradas o pequeñas calvas, o la parte superior de la frente en las mujeres.
Aunque en muchas ocasiones los cirujanos prefieren rapar toda la cabeza para tener mayor visibilidad y comodidad al realizar el trasplante y la selección de los folículos, y por una serie de ventajas que veremos más adelante, técnicamente es posible realizar un implante de pelo sin rapar la cabeza, lo cual elimina muchos inconvenientes estéticos de la operación pero también hace que la intervención sea más larga y complicada, y por tanto generalmente más cara.
Para llevar a cabo un implante capilar sin rapar el pelo con la técnica FUE, el cirujano escoge el área donante ideal y rasurará una pequeña zona de la misma; si el paciente tiene el pelo largo (por ejemplo una mujer) resulta mucho más fácil, ya que se realiza un rapado intercalando franjas con y sin pelo para que éste cubra de forma natural las zonas rasuradas situadas debajo. No obstante también es factible teniendo cabello de unos 6-7 centímetros de longitud.
La intervención se realiza extrayendo uno a uno los folículos e implantándolos posteriormente en la zona receptora, que en algunos casos puede dejarse también sin rapar aunque esto hará el trasplante mucho más difícil. Pese a que un trasplante de pelo sin rapar la cabeza resulta atractivo para pacientes que temen el impacto estético de perder su pelo temporalmente, es importante saber que tiene una serie de limitaciones e inconvenientes. Veamos cuáles son.
¿Qué inconvenientes presenta un injerto capilar sin rapar la cabeza?
Como hemos dicho, la mayoría de los cirujanos prefieren rapar por completo la cabeza en un trasplante capilar, y esto es así porque un injerto de pelo sin rapar el cuero cabelludo resulta más complicado, menos higiénico, y puede presentar más complicaciones y efectos secundarios. Otras desventajas que presenta una intervención sin rapar son:
- Sólo puede realizarse en pacientes con el pelo relativamente largo o que no tengan una calvicie avanzada
- Implica poder extraer menos unidades foliculares por cada sesión, lo que hará necesario pasar varias veces por quirófano para obtener resultados similares
- Al limitar el área donante a una zona más pequeña, hay mayor riesgo de que se presenten complicaciones debido a una extracción excesiva
- Tanto los lavados como los cuidados posteriores del pelo y el cuero cabelludo son más complicados
- Habitualmente el coste de un trasplante capilar FUE sin rapar es mayor
Por el contrario, rapar la cabeza en un trasplante capilar tiene varias ventajas, destacando entre ellas:
- Tanto la extracción como el injerto de los folículos es más sencilla, rápida y precisa
- El equipo médico tiene una perspectiva mayor y mucho más clara de la zona donante y la zona receptora, facilitando notablemente la intervención
- La limpieza del cuero cabelludo durante la operación es mucho más fácil
- No existe riesgo de que los folículos se enreden o se pierdan en el pelo al injertarlos en la zona receptora
Por tanto, un injerto capilar sin rapar el pelo de la cabeza es posible siempre que la zona a tratar sea pequeña y que el cirujano encargado de la operación lo vea aconsejable. En Clinicana contamos con una gran experiencia en trasplantes capilares y con un equipo médico especializado que le ofrecerá el mejor asesoramiento para su intervención. Lea las opiniones sobre el injerto capilar en Turquía, y descubra por qué somos la clínica más recomendada.